Crystal Palace ha quedado oficialmente excluido de la UEFA Europa League 2025/26 por incumplir las normas de propiedad múltiple de clubes impuestas por la organización europea. Como resultado, Nottingham Forest ocupará su lugar en el torneo. Esta medida le costará a Palace una pérdida inmediata de 3.9 millones de libras en premios de participación, cifra que ahora beneficiará al conjunto del City Ground.
¿Qué provocó la expulsión del Crystal Palace de la Europa League 2025?
La decisión de la UEFA se basa en el artículo 5.01 del reglamento de competiciones, el cual impide la participación simultánea de clubes con el mismo grupo propietario. Crystal Palace y Olympique de Lyon forman parte de una misma estructura empresarial. Dado que el club francés finalizó en una mejor posición en su liga local, obtuvo la prioridad para disputar la Europa League.
Aunque Palace se había clasificado al torneo al conquistar la FA Cup, la confirmación del ascenso administrativo de Lyon en la Ligue 1 selló su suerte. La normativa establece que, ante la coincidencia en propiedad, se privilegia al equipo con mejor ubicación en su campeonato nacional.
La sanción fue emitida por el Club Financial Control Body (CFCB) de la UEFA tras analizar la documentación de ambos clubes hasta el 1 de marzo de 2025. La resolución implica que Palace deberá conformarse con disputar los play-offs de la UEFA Conference League el próximo mes.
¿Cuánto pierde Crystal Palace y qué gana Nottingham Forest?
La exclusión de Crystal Palace conlleva una pérdida económica inmediata de 3,9 millones de libras, monto correspondiente al premio de entrada a la fase de grupos de la Europa League. Esos fondos pasarán a Nottingham Forest, que ocupará la vacante generada por la sanción.
El club londinense ya comunicó que apelará la medida ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) en Suiza, con la intención de revertir el dictamen. Mientras tanto, Forest comenzará a planificar su retorno a una competición europea, beneficiándose directamente de una decisión sin precedentes en esta edición.
Esta situación también reabre el debate sobre la legalidad y los efectos deportivos de la propiedad múltiple en el futbol europeo, un esquema que sigue generando conflictos entre clubes afiliados a grupos inversores con alcance multinacional.